SELLO | CATEDRAL DE ALBARRACÍN

CATEDRAL DE ALBARRACÍN

DATOS TÉCNICOS DEL SELLO

Número EDIFIL: 4657


Temática: Catedrales

Fecha de puesta en circulación: 15 de julio de 2011

Procedimiento de impresión: Calcografía y offset

Papel: Estucado, engomado, mate, fosforescente

Dentado: 13 3/4

Formato del sello: 28,8 x 40,9 mm (vertical)

Formato de la hoja bloque: 105,6 x 79,2 mm (horizontal)

Valor postal: 2,84 €

Tirada: 280.000 hojas bloque

INFORMACIÓN SOBRE EL MOTIVO DEL SELLO

La serie de emisiones de Catedrales dedica una hoja bloque a la Catedral del Salvador de Albarracín. Reproduce el sello una vista de la torre del campanario, y se completa la hoja bloque con una panorámica del conjunto catedralicio y de los edificios de su entorno.

Se halla la población turolense de Albarracín a orillas del río Guadalaviar y a una altitud de 1.171 metros. Pertenece su diócesis a Teruel-Albarracín y fue declarada la ciudad Monumento Nacional en junio de 1961.

Aunque la Catedral de Albarracín se asienta sobre los restos de un anterior templo románico, la construcción del edificio renacentista que hoy conocemos fue iniciado hacia 1530 por el obispo Gaspar Jofré de Borja y concluido hacia 1595, siendo obispo Martín Terrer Valenzuela, quien mandó levantar la torre del campanario. En la construcción del conjunto catedralicio intervinieron los maestros Quinto Pierres Vedel, al que se debe la construcción de la cubierta y de varias capillas, y Martín de Castañeda que intervino en el coro y en la cabecera del templo. Posee una única nave y la cabecera está formada por un ábside poligonal. Tiene un claustro que sirve de comunicación con el Palacio Episcopal y tanto la Catedral como el claustro sufrieron una profunda modificación en el siglo XVIII, dándole la apariencia barroca actual. Dispone el edificio de dos puertas de acceso y de su interior destacamos el Altar Mayor y retablo dedicados al Salvador que da nombre a esta Catedral. Cuenta además con las capillas de la Magdalena, San Antonio Abad, San Sebastián, de las Almas, de Santa Ana, del Pilar, con un retablo barroco y una imagen de la Virgen, y la capilla de San Juan Bautista, también con un altar barroco. Destacan igualmente del conjunto, su coro con sillería gótico-manierista y la portada del claustro obra de Ezpeleta y Juan López, además de la capilla de la Inmaculada Concepción.

El Museo Catedralicio se halla ubicado en el antiguo Palacio Episcopal y en él se guardan tapices, pinturas, cálices, cruces procesionales, libros, vestimentas y otros objetos sagrados destinados al culto y actos religiosos.