SELLO | AMPLIACIÓN DE LA UNIÓN EUROPEA

AMPLIACIÓN DE LA UNIÓN EUROPEA

DATOS TÉCNICOS DEL SELLO

Número EDIFIL: 4080


Temática: Varios Temas

Fecha de puesta en circulación: 3 de mayo de 2004

Procedimiento de impresión: Huecograbado

Papel: Estucado, engomado, fosforescente

Dentado: 13 3/4

Formato de los sellos: 40,9 x 28,8 mm (horizontales)

Valor postal: 0,52 €

Tirada: 1.000.000 de minipliegos

INFORMACIÓN SOBRE EL MOTIVO DEL SELLO

A partir del 1 de mayo de 2004, la Unión Europea (UE) se amplía con el ingreso de diez nuevos países: Chipre, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Malta, Polonia y República Checa, que para ser admitidos han tenido que cumplir las condiciones económicas y políticas conocidas como los "Criterios de Copenhague". Con esta ampliación, la organización europea pasa a estar constituida por 25 países y se convierte en el mayor bloque comercial del mundo, con una población cercana a los 500 millones de ciudadanos.

El origen de la unificación europea surgió en 1951, con la creación de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA) entre Alemania, Bélgica, Francia, Holanda, Italia y Luxemburgo. En 1957, estos seis países firmaron los Tratados de Roma, por los que se crearon la Comunidad Europea de la Energía Atómica (EURATOM) y la Comunidad Económica Europea (CEE). Años más tarde, estas tres instituciones se fusionaron y pasaron a contar con una nueva forma de organización y Gobierno. Con el paso del tiempo, las primitivas aspiraciones de la UE, basadas en el comercio y la economía, han dado lugar a la creación de un espacio único, libre y sin fronteras, donde democráticamente se toman decisiones sobre asuntos de interés común para los países miembros. Esto se consolidó con la firma del Tratado de Maastricht, en 1992, donde definitivamente se adoptó el nombre de Unión Europea. 


Desde su fundación, la UE se ha ido ampliando sucesivamente y, así, a los seis países originarios se unieron, en 1973, Dinamarca, Irlanda y el Reino Unido; en 1982, Grecia; en 1986, España y Portugal; y en 1995, Austria, Finlandia y Suecia. Cuenta con cinco instituciones que cumplen funciones específicas: el Parlamento Europeo, elegido por los ciudadanos de los Estados miembros; el Consejo de la Unión Europea, representa a los Gobiernos de los Estados miembros; la Comisión Europea, órgano ejecutivo; el Tribunal de Justicia, garantiza el cumplimiento de la ley; y por último, el Tribunal de Cuentas, encargado del control de la legalidad del presupuesto económico. Estas instituciones se apoyan, a su vez, con otros cinco importantes organismos: el Comité Económico y Social Europeo, el Comité de las Regiones, el Banco Central Europeo, el Defensor del Pueblo europeo y el Banco Europeo de Inversiones.