SELLO | TREN DE LA FRESA, MADRID-ARANJUEZ

TREN DE LA FRESA, MADRID-ARANJUEZ

DATOS TÉCNICOS DEL SELLO

Número EDIFIL:

Temática: Trenes Históricos

Fecha de puesta en circulación: 25 de junio de 2024

Procedimiento de impresión: Offset

Soporte: Estucado, engomado, fosforescente

Formato del sello: 74,6 x 28,8 mm (horizontal)

Dentado del sello: 12 ¾ (horizontal) y 13 ¼ (vertical)

Efectos en pliego: 15 sellos

Valor postal: 3 €

Tirada: 117.000 sellos

Diseño:

INFORMACIÓN SOBRE EL MOTIVO DEL SELLO

Ya a mediados del siglo XIX se hablaba de la necesidad de unir la capital de España con el Mediterráneo. Por ello, el 9 de febrero de 1851, con la presencia de la reina Isabel II, se inauguró la línea Madrid-Aranjuez como parte de ese gran proyecto, impulsada por el Marqués de Salamanca.

La longitud de la línea era de 49 kilómetros y su trazado se conserva prácticamente íntegro. Esta ruta pasa por localidades como Getafe, Pinto, Valdemoro o Ciempozuelos a través del valle del Manzanares a los de Jarama y el Tajo.

Esta ruta favoreció, entre otras cosas, el comercio entre Madrid y las poblaciones cercanas donde los productos de la huerta eran los grandes protagonistas. La fresa, uno de los cultivos más significativos de Aranjuez, acabó dando nombre a este histórico tren.

Actualmente el tren realiza un trayecto turístico donde los pasajeros pueden disfrutar de un viaje agradable desde la decimonónica estación de Delicias, en Madrid, hasta la estación de Aranjuez.

En 1984 se iniciaron estos viajes que se desarrollan durante los fines de semana de primavera y otoño. Supone para sus viajeros una experiencia única donde el ocio, la historia y la cultura se mezclan para rememorar un pasado y disfrutar de un destino insuperable como es el Real Sitio de Aranjuez, declarado Paisaje Cultural Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

El Tren de la Fresa está formado por un furgón y un vagón de los años 60, cuatro coches de madera de los años 20 denominados ‘Costa’ (llamados así porque entre sus servicios más habituales se encontraban los de cercanías de la costa catalana), y un coche metálico de pasillo lateral de los años 40.

El hecho de que este tren histórico siga recorriendo las vías que hace casi dos siglos se construyeron como avance económico de un país, enriquece la cultura del mismo para disfrute de todo aquel que decida sacar un billete con sabor a fresa.

El sello que dedica Correos incorpora olor a fresa y en él aparecen los vagones históricos del tren.